Con motivo del 225 aniversario de las clases de vinos con mayor crianza adquiridas en 1798, llega al mercado esta selección única entre las mejores botas de crianza biológica del casco bodeguero de San Miguel, en la Calle Banda Playa del Barrio Bajo de Sanlúcar.

Para la saca se han registrado un total de 712 botas entre las que se han escogido únicamente 35, para embotellar tan solo 3.000 botellas en formato de 750 ml y 300 Magnum de 1.500 ml, de los cuales únicamente llegarán al mercado 225 unidades bajo reserva previa.

Un homenaje a la Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda, en el que se ha recuperado un antiguo cartel publicitario pintado en madera de comienzos del S. XX para elaborar una etiqueta y una presentación dignas de un contenido exclusivo.

En fase visual nos encontramos con una Manzanilla de color dorado, muy limpia y brillante. Vino en rama, con una ligerísima filtración que no impide que dentro de la botella pueda desarrollarse velo de flor, por lo que es importante mantener siempre la botella en posición vertical.

Temperatura de servicio entre 4-5 grados centígrados, para ser disfrutada ligeramente atemperada a partir de los 8 grados, mejor fresca.

En nariz es simplemente Barrio Bajo de Sanlúcar de Barrameda, albero, soleras centenarias de botas de roble americano sobre bajetes de piedra entre lozas y ladrillos antiquísimos. Huele a crujía de bodega antigua, aquellas donde surgió al mundo el milagro de la crianza biológica, del velo de flor. Intensidad aromática media alta, que con temperatura se transforma en un perfume en el que cerrar los ojos y perderse, con notas yodadas de marea baja frente a la reserva de la Biosfera que es Doñana.

En boca es seca, sabrosa, mantecosa, fresca, sápida, salina. Tras el primer sorbo es muy amplia, con gran volumen. Persistente, intensa. Nos hace salivar, nos invita a seguir bebiendo.

Su excepcional origen de viñedos propios en Balbaína Alta, pago histórico de marcado carácter sanluqueño, unido a su crianza en botas de soleras del casco bodeguero del Siglo XIX de San Miguel en la Banda Playa de la ciudad de Sanlúcar, otorgan a esta Manzanilla de gran finura y elegancia.

Este vino representa a la perfección los dos grandes suelos de Sanlúcar, el de la viña y el de la bodega, en perfecta armonía para el deleite de los sentidos. Es Sanlúcar de Barrameda en una copa. La evolución de Balbaína Alta en el Barrio Bajo, en una zona de la ciudad históricamente rodeada de navazos, muy cerca del nivel freático, con unas condiciones excepcionales de humedad y temperatura que consiguen mantos blancos de velo de flor.

Te la llevamos a casa de forma segura en este ENLACE.